Religión y Fútbol

Hace un par de días recordé el peculiar problema que tuvo Aouate (al que le partieron la cara) con el "Yom Kipur", que prohibía al jugador israelita hacer cualquier tipo de ejercicio físico un domingo a partir de las 8 de la tarde, me hizo recordar la peculiar historia de Carlos Roa, un portero argentino que llegó a renunciar al fútbol de élite para respetar un mandato de la religión adventista que le prohibía jugar al fútbol los sábados.

Y es que el caso no es único, en ocasiones surge la duda en futbolistas cuando tienen que elegir entre la religión o el fútbol. Al portero deportivista Aouate se le resolvió el conflicto al adelantar dos horas el partido del que tenía el domingo, pero si no hubiese sido así, Aouate tendría que haber escogido entre cumplir con su club o con su religión. Grupos ultraortodoxos de su país pidieron publicamente que no se le volviese a convocar si jugaba a partir de las ocho.

Además también podemos encontrar entre el fútbol y la religión un grupo denominados los Atletas de Cristo, una entidad fundada en 1984, la cual según asegura en su "web", "no tiene fines lucrativos y subsiste a traves de donaciones voluntarias". Su visión es que todo el mundo pueda ser alcanzado por Cristo a través del lenguaje universal del deporte.

En el vestuario de dicho grupo podemos encontrar a un gran número de futbolistas de la "seleçao" que ganó el Mundial de 2002, donde se llegó a ver a Edmilson mostrar una camiseta donde ponía: "Jesus te quiero", tras conquistar el pentacampeonato.

Entre los futbolistas brasileños en activo y otros ya retirados que son Atletas de Cristo destacan gente como Donato, Bebeto, Paulo Sergio, Zé Roberto, Taffarel, Cacau, Adehmar, Bordon y Euller. Aunque siempre hay otros que no tienen la nacionalidad brasileña pero siguen el Evangelio del mismo modo.