El justiciero Fleurquin

A principios de Enero de 2006 el Cádiz recibía al Barcelona en el Ramón de Carranza. Como suele ser habitual, la directiva del club gaditano procedió a la entrega de entradas a sus jugadores, afín que de que estos las repartiesen entre sus familiares o amigos. Hasta ahí todo bien. Sin embargo, el centrocampista uruguayo José Andrés Fleurquín no tuvo mejor idea que ceder las 2 que le correspondían a un reventa (aficionado del Cádiz) para que este las colocara y le entregase gran parte de los beneficios, algo que nunca sucedió. Como si de uno de los chicos de los Soprano se tratase, el charrúa no tuvo mejor idea que agredir al revendedor para recuperar sus nada más y nada menos que 180 euros, que como ya se imaginarán ustedes esta cifra de euros para un jugador de fútbol de primera división, no es moco de pavo. ¿Las consecuencias? Una denuncia del agredido en cuestión que terminó en Sentencia del Juez de Instrucción número 4 de Cádiz que obligaba a Fleurquín a indemnizarle con 50 euros y una multa diaria de 20 durante un mes. Según explica la sentencia, "el 13 de enero de 2006 Andrés Fleurquin se presentó en el establecimiento de V.M.Z.H. y, con motivo de una deuda pecuniaria, le golpeó en la cara causándole una contusión facial sin que necesitara tratamiento quirúrgico..."